Higiene Digna y Segura

El  estudio más reciente  realizado por los  CDC (Centers for Disease Control and prevention) señala que: 

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• Aproximadamente 370 personas resultan heridas en un baño todos los días en los EE. UU., lo que lo convierte en la segunda habitación más peligrosa de la casa, sólo superada por la cocina.

• El  66% de las lesiones que ocurren en los baños suceden cuando las personas están en la bañera o en la ducha.

• La más común de estas lesiones proviene de resbalones y caídas mientras se ducha o se baña. Estas representan más de un tercio, alrededor de 78,000, de todas las lesiones en el baño en los Estados Unidos.

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Estas situaciones se agudizan en familias con hijas e hijos con discapacidad múltiple y epilepsia ya que, a parte de las estadísticas antes mencionadas,  se agregan condiciones de salud y de discapacidad que pueden agravarse al no tener una silla de ducha que garantice la dignidad y seguridad en este espacio. Esto es importante tanto para el infante o joven con discapacidad y epilepsia como para quien realiza esta actividad: su mamá, su papá o ambos. Lo que trae consecuencias a corto, mediano y largo plazo como contracturas, escoliosis, lesiones por mala postura, además de lesiones debido a caídas. Es posible prevenir y evitar todas estas lesiones si se cuenta con la silla de ducha adecuada.

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Actualmente, en alianza con el ITESO campus Guadalajara, estamos realizando prototipos de sillas de ducha que respondan a las necesidades de nuestras familias.